En mi primer día de vacaciones de Navidad, hoy soy Juan López Uralde director ejecutivo de Greenpeace España, que sigue preso en las cárceles danesas por ejercer su derecho a la libertad de expresión y desplegar una pancarta con el lema 'Los políticos hablan, los líderes actúan' al entrar a la recepción oficial que la Reina de Dinamarca ofrecía a 120 altos mandatarios mundiales y Jefes de Estado, en la fracasada cumbre de la ONU sobre el cambio climático celebrada en Copenhague.
Este es un ejemplo más de lo alejada que está la política y la ley de los ciudadanos y la justicia.
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